Que los chilenos son buenos para las drogas recreativas no es novedad. Es cosa de ver cómo andan siempre con vituperios varios para aumentar el buen venir. Ahora eso sí hay prueba de aquello. Un estudio realizado por Global Partners llamado “¿Tu empresa da positivo?” arrojó un alza de consumo de drogas o alcohol en los trabajadores del sector privado: pasó de un 20,4% a una positividad de 21,7%.
La droga más consumida, de acuerdo a los exámenes, fueron marihuana (44,97%), cocaína (32,28%) y el poli consumo de ambas (19,58%). De acuerdo a Diario Financiero, entre 2018 y 2019 se testearon 17.708 trabajadores. Ante la pandemia, no fueron considerados los antecedentes de 2020 y 2021. Por ejemplo, 5,97% de los trabajadores analizados en horario laboral dieron positivo a una sustancia. Todos ellos de empresas que realizan controles de drogas de forma esporádica.
Resultados que se basaron en un grupo de 17.708 trabajadores testeados durante los años 2018 y 2019 para detectar el consumo reciente de alcohol y drogas estupefacientes y psicotrópicas, bajo el estándar internacional del programa Drug Free WorkPlace (DFWP), un apoyo metodológico para que las empresas puedan abordar la problemática. Los datos de 2020 y 2021 no se consideraron dada la situación de pandemia que conllevó un contexto de labores remotas.
En el caso de las personas que se desempeñan en compañías que realizan control de alcohol y drogas de forma esporádica, pero que no poseen un programa de prevención e inhibición permanente, el 5,97% de los testeados en horario laboral resultó positivo. Si bien esta tasa es menor al 6,1% de la versión previa, la diferencia es mayor con quienes laboran en empresas que desarrollan el Programa DFWP, donde el 3,06% dio positivo. De todas formas, este último porcentaje es mayor al 2,7% de la medición anterior.
El problema de la cocaína
Lo inquietante es que esta vez la brecha en el consumo de ambas se redujo a 12,69 puntos porcentuales desde los 27,5 del estudio previo. Es decir, la penetración de la cocaína en los consumidores se ha incrementado, especialmente en las personas en el rango etario entre 26 y 35 años, según los antecedentes.
Los resultados por actividad económica -y en aquellas firmas sin políticas ni programas al respecto- mostraron que en la industria y manufactura el 28,57% de las personas testeadas arrojó positivo, seguido por la construcción con un 23,81%, servicios y otros con un 18,64%, comercio con un 17,65% y, finalmente, transporte con un 10,62%.

Los casos de consumo de cocaína se dieron principalmente en la industria y manufactura; servicios y otros y construcción. En la marihuana (THC) el orden cambió: primero comercio, secundado por construcción e industria y manufactura.
Para el gerente general de Global Partners, Patricio Labatut, existen varias razones que podrían explicar el alza en el consumo entre los trabajadores, pero a su juicio las principales son falta de educación y ausencia de una legislación al respecto.
“En Chile, no tenemos ningún artículo en el Código del Trabajo que hable del consumo de alcohol y drogas en el trabajo. Así de sencillo. En legislaciones como la de Perú está prohibido el consumo de alcohol en el trabajo y está especificado. Pero acá no hay nada”, dice. Y a este cuadro, agrega, se suma una escasa educación sobre este problema.
Desde su perspectiva, también se ha ido normalizando el consumo a drogas entre las personas. “Hay estudios que muestran que la percepción de riesgo es mayor con el alcohol y el cigarro, no con las drogas”, cuestiona.