“Esta es una victoria significativa para Nuevo México. Los trabajadores se beneficiarán de la oportunidad de hacer carrera en esta nueva economía. Los empresarios se beneficiarán de la oportunidad de crear nuevas empresas lucrativas. El estado y los gobiernos locales se beneficiarán de los ingresos adicionales”. Esas fueron las palabras de Lujan Grisham, gobernadora de Nuevo México, tras firmar la legalización de la marihuana en dicho estado.
Los legisladores se unieron detrás de un marco de legalización del representante estatal Javier Martínez de Albuquerque que proporciona procedimientos automatizados para la eliminación de las condenas por marihuana en el pasado. Además, el proyecto de ley da al gobernador una mano fuerte en la supervisión de la marihuana recreativa a través de su superintendente designado del Departamento de Regulación y Licencias. Los reguladores pueden poner un tope a las cantidades de cultivo de marihuana e imponer una tasa estatal por planta de hasta 50 dólares al año.
La superintendente de la agencia, Linda Trujillo, dijo que los mayores de 21 años podrán empezar a cultivar marihuana en casa y poseer hasta 56 gramos de marihuana fuera de sus hogares a partir del 29 de junio. La venta de cannabis recreativo comenzará el próximo año el 1 de abril en los dispensarios con licencia estatal.
El detalle de la legislación
Los cultivadores de marihuana en casa podrán cultivar hasta seis plantas por persona, o 12 por hogar. El olor de la marihuana ya no será motivo de incautación policial. Los gobiernos locales no podrán prohibir la instalación de negocios de marihuana. Pueden opinar, a través de la zonificación, sobre la ubicación y el horario de funcionamiento.
Los dispensarios de marihuana medicinal ya se están instalando en pequeñas ciudades cercanas a la frontera con Texas, un importante mercado potencial para el turismo de la marihuana. Sigue siendo ilegal transportar marihuana a través de las fronteras estatales.