La Ley de Auto Cultivo Seguro, que se encuentra durmiendo en el Senado hace ya un tiempo, tiene nuevo nombre: Ley Rodrigo Barraza. En memoria del padre fue formalizado por cultivar y producir productos medicinales de cannabis para su hija y que, a pesar de ser absuelto, siguió sufriendo hostigamiento policial por el hecho y terminó acabando con su vida.
Intentando hacer memoria, Fundación Daya realizó un microdocumental que condensa el proceso judicial con el que tuvo que lidiar Barraza. A través de la lupa de este caso, cuyo desenlace es lacerante, se logra tomar conciencia de las grandes inconsistencias en la legislación nacional, la jurisprudencia judicial y, finalmente, la falta de criterio en los entes persecutores.