La licencia de un laboratorio de Washington para analizar la calidad de la marihuana ha sido suspendida después de que se descubriera que había falsificado los datos de las pruebas y tratado de destruir las pruebas del delito, según la Junta de Licores y Cannabis.
El Laboratorio Praxis de Centralia mintió sobre la cantidad de THC, el químico psicoactivo de la marihuana que hace que el usuario se drogue, que había en 1.200 muestras de hierba, según un comunicado de prensa de la agencia. El laboratorio etiquetó los productos como que tenían más THC del que había en realidad, según el comunicado.
“Etiquetar la cannabis con niveles de potencia falsamente altos de THC es una forma de engaño al consumidor y está prohibido por la ley de Washington”, decía el comunicado. “Debido a esto, los consumidores de cannabis que buscan resultados psicoactivos más pronunciados pueden optar por comprar cannabis con niveles más altos de THC”.
El dueño del laboratorio también “intentó destruir la evidencia de datos falsificados en un esfuerzo por obstruir la capacidad del LCB para llevar a cabo una investigación completa”, según el comunicado de prensa.
El jueves, la agencia emitió un resumen de la suspensión de la certificación del laboratorio, que es efectiva por 180 días, dijo el comunicado. Después de la suspensión sumaria, la agencia “buscará la revocación permanente de la certificación del ‘laboratorio de marihuana’ debido a un fraude y a la subsiguiente obstrucción de la investigación”, según el comunicado.