Mississippi está legalizando la marihuana medicinal para las personas con enfermedades debilitantes como el cáncer, el SIDA y la enfermedad de células falciformes. Si bien el estado ya había discriminalizado el consumo y posesión, este es un gran avance para los pacientes que utilizan la cannabis como tratamiento.
El gobernador republicano Tate Reeves firmó la legislación el miércoles pasado y se convirtió en ley inmediatamente. Aunque falta todavía establecer los reglamentos que permitirán que abran los primeros dispensarios de marihuana en la zona.
“No hay duda de que hay individuos en nuestro estado que podrían estar significativamente mejor si tuvieran acceso a dosis de cannabis prescritas médicamente”, escribió Reeves en un comunicado publicado en Twitter. “También hay quienes realmente quieren un programa de marihuana recreativa que podría llevar a más gente a fumar y menos gente a trabajar, con todos los males sociales y familiares que eso conlleva”.
La Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales dice que 36 estados y cuatro territorios ya permiten el uso médico del cannabis. Mississippi se convierte en el 37º estado. Sólo 18 han lelgalizado completamente.
Una mayoría de los votantes de Mississippi aprobó una iniciativa de marihuana medicinal en noviembre de 2020, y habría permitido a la gente comprar hasta 5 onzas al mes. El Tribunal Supremo del estado la invalidó seis meses más tarde al dictaminar que el proceso de iniciativa del estado era obsoleto y que la medida no se puso correctamente en la papeleta. La Cámara de Representantes y el Senado del estado, ambos controlados por los republicanos, aprobaron la semana ante pasada la versión final de la Ley del Senado 2095.
La nueva ley permitirá a los pacientes comprar hasta 3,5 gramos de cannabis al día, hasta seis días a la semana. Eso supone algo así como 85 gramos. Establece impuestos sobre la producción y la venta de cannabis, y especifica que las plantas deben cultivarse en interiores en condiciones controladas. Reeves dijo que debido a la reducción de 5 onzas al mes en la iniciativa a 3 onzas al mes en la nueva ley, “habrá cientos de millones de porros menos en las calles debido a esta mejora”.
La ley da a las ciudades y condados 90 días para optar por no permitir instalaciones de marihuana medicinal, para su cultivo o venta. Sin embargo, los habitantes de esas comunidades podrían solicitar una elección para anular las decisiones de los funcionarios locales y permitirlas. Aunque, sinceramente, no sé quién estaría tan loco para denegar esta oportunidad.