Amazon quiere que se legalice el uso recreativo de la marihuana a nivel federal. Así lo aseguró el mismo Dave Clark, director ejecutivo del área de consumidores de Amazon. Su iniciativa comenzará con la detención total de las pruebas de drogas para detectar marihuana y una ayuda en el lobby legislativo. Según Clark, el tratamiento que tendrán los consumidores de cannabis será como los empleadores convencionales con el alcohol. Eso significa que no debes hacerlo en el trabajo, pero en tu vida fuma lo que quieras.
Los puestos sujetos a la regulación del Departamento de Transporte de EE.UU. seguirán incluyendo la prueba de marihuana, dijo Clark, y agregó que la compañía “continuará haciendo controles de deterioro en el trabajo y realizará exámenes para todas las drogas y el alcohol después de cualquier incidente”. Eso sí, si tienes una receta para tratar tu migraña u otra condición, podrías seguir con tu tratamiento.
Clark continuó diciendo que Amazon respalda un proyecto de ley federal de legalización de la marihuana, la Ley de Reinversión y Eliminación de Oportunidades de Marihuana. “Esperamos que otros empleadores se unan a nosotros y que los legisladores actúen con rapidez para aprobar esta ley“.
Los problemas laborales de Amazon
Amazon acapara prácticamente la mitad (por lo bajo) del comercio electrónico. Disfruta de la mayor red de distribución del planeta y aumenta sus beneficios a ritmo de vértigo cada año. De hecho, es una de las únicas empresas que ha crecido durante la pandemia. Sin embargo, sus empleados ven poco y nada de estos beneficios, y la empresa mantiene una constante fricción con la formación de sindicatos.
De a poco, cada uno de sus centros de distribución, los trabajadores se han sindicado, como explica Bloomberg. Sus protestas: escasa seguridad, salarios inadecuados, turnos de 12 horas sin suficientes descansos, y una distribución horaria infernal. La imagen de Amazon se ha visto progresivamente asociada a pulseras que monitorizan la actividad laboral, presiones para frenar la sindicalización de sus empleados (común al sector), coacciones, maltrato psicológico, explotación en el trabajo o puenteos ilegales de huelgas. No todas las acusaciones han de ser ciertas, pero la conversación sobre la empresa ya rota en torno a ideas que dañan su reputación.
Su historial no queda ahí. Amazon, que es el segundo mayor empleador privado de Estados Unidos, también es líder en otra categoría: la frecuencia con la que se lesionan sus trabajadores de almacén. Según datos de lesiones relacionadas con el trabajo de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional mostraron que esos trabajos pueden ser más peligrosos que en almacenes comparables. Desde 2017, Amazon reportó una tasa más alta de incidentes de lesiones graves que causaron que los empleados faltaran al trabajo o fueran cambiados a tareas de trabajo ligero que en otros operadores de almacenes en el comercio minorista.
En 2020, por cada 200.000 horas trabajadas en un almacén de Amazon en Estados Unidos -el equivalente a 100 empleados trabajando a tiempo completo durante un año- hubo 5,9 incidentes graves, según los datos de la OSHA. Eso es casi el doble de la tasa de los almacenes que no son de Amazon. En comparación, Walmart, el mayor empleador privado de Estados Unidos y uno de los competidores de Amazon, informó de 2,5 casos graves por cada 100 trabajadores en sus instalaciones en 2020.