Si hablas con suficientes fumetas, eventualmente llegará el argumento que habla de una hierba que vence al alcohol por los méritos de efectos secundarios. Entre ellos la resaca o la falta de ella. Si bien, es cierto que los efectos del consumo de alcohol pueden producir algunas consecuencias verdaderamente indeseables -ocasionalmente graves- el cannabis no puede afirmar que carece totalmente de resacas. Al menos, eso es lo que aseguraba un estudio de 1985 y que muchos usuarios han confirmado.
Los hallazgos sugerían que fumar marihuana puede producir efectos residuales (resaca) al día siguiente de haberla fumado. La naturaleza y el alcance precisos de esos efectos han sido difusos desde entonces. Esto porque el estudio se hizo sólo en 13 hombres fumadores de marihuana, a quienes les midieron distintos efectos en el cuerpo, y ver las diferencias a la mañana siguiente.
A veces denominada por los gringos como “resaca hippie”, los síntomas asociados con la resaca inducida por el cannabis van desde la neblina mental y la lentitud física hasta un persistente dolor de cabeza. Aunque podría decirse que son menores cuando se comparan con los posibles resultados de bebidas alcohólicas; hay consumidores que juran que las resacas de hierba son reales, así como los que la descartan como una tontería.
El estudio de 1985 fue incapaz de afirmar definitivamente si tales efectos eran de naturaleza negativa. Por eso en 1998 un estudio publicado en NIDA replicaron el estudio, concluyendo finalmente que al consumir un porro, los efectos residuales eran “mínimos”.
Así que no exageren.